martes, 6 de enero de 2009

The SPIRIT

2008. Superhéroes. Dir: Frank Miller. Guión: F. Miller basado en el cómic de Will Eisner. Música: David Newman Int:Gabriel Match, Eva Mendes, Scarlett Johanson, Paz Vega y Samuel L. Jackson.

Este genial cómic de Will Eisner ha sido adaptado este año a la gran pantalla de la mano de Frank Miller, un no menos genial dibujante y guionista de cómics, pero que en el campo de la dirección cinematográfica aun deja bastante que desear.
Lo primero que hay que tener en cuenta, es que el cómic y el cine son lenguajes artísticos totalmente distintos. Al igual que ocurre con el cine y con la literatura, e incluso con el teatro. Esto, es algo que el propio Miller ya debía haber detectado en su primera incursión dentro del mundo del celuloide. Dicha incursión la realizó de la mano del Mexicano Robert Rodríguez dirigiendo la adaptación de la novela gráfica del propio Miller Sin City: La ciudad del pecado. Lo que en el papel funcionaba de una forma excelente, perdía gran parte de su dramatismo y de su lírica al trasladarlo a la gran pantalla, presentando unos personajes tan duros y oscuros, que quedaban un poco ridículos en el film. Cosa que no ocurría para nada en el cómic original.
Quizás inspirado por el éxito de 300, otra novela gráfica de su creación, adaptada a la gran pantalla por Zack Snyder, Miller se animó a realizar su aventura en solitario y decidió adaptar la obra de otro autor con su propio estilo.
El problema para mi reside principalmente en que el personaje de Spirit, en su versión de cómic, cuenta historias muy breves (sobre unas 6 u 8 páginas) que no tienen la suficiente profundidad para trasladarlas a la gran pantalla en forma de largometraje. Así pues en la cinta de Miller,
veremos una serie de personajes realmente atractivos (sobretodo en el ámbito femenino) que acaban contándonos una historia más bien ridícula, que no engancha para nada a lo largo de todo el film. Además, volvemos a encontrar el mismo problema de Sin city, ya que lo que en el cómic funciona realmente bien, como las carreras por las cimas de los edificios más altos de la ciudad, en el cine resulta bastante ridículo. A esto hay que sumar unas leves muestras de humor constantes en toda la cinta, que crean la sensación de que la misma va dirigida a un público infantil, perdiendo así gran parte de su encanto.
En fin, que si ya dentro del cómic, no podemos más que echar de menos las primeras obras de Miller, como Daredevil, Ronin, Batman: Año uno y El regreso del señor de la noche, en el cine no se puede decir que su debut haya sido muy esperanzador. Miller ahora será más famoso, y por supuesto, tendrá muchísimo más dinero, pero su creatividad no pasa por su mejor momento, y esas pequeñas pinceladas fascistas que en ocasiones se han entrevisto en su obra, no podemos decir que nos auguren buenos tiempos en la carrera del que, para mi, fue el mejor creador de cómics de superhéroes de todos los tiempos (y que nadie se ofenda…)

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